El PP llama comunista a Francisco, Papa y vicario de Cristo, en este tuit por reunirse con Yolanda Díaz, que después ha borrado ante las quejas de los católicos

Yolanda Díaz y el Papa Francisco se reunirán el próximo sábado en el Vaticano. La vicepresidenta segunda será recibida por el Sumo Pontífice a las 11:00 horas, según fuentes del Ministerio de Trabajo.
La secretaria de comunicación del PP ha tenido que borrar un tuit la respecto, en el que llamaba comunista al máximo representante de la Iglesia Católica y lider infalible de la cristiandad, ante las quejas de los tuiteros que le han recordado por ejemplo la reunión de Juan Pablo II y Fidel Castro.
https://twitter.com/maca_puentes/status/1468956491868565513?ref_src=twsrc%5Etfw

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El objetivo del encuentro, según estas fuentes, será mantener un «diálogo sobre algunos desafíos comunes de la Humanidad». En la agenda del encuentro figuran temas como la precariedad laboral, la «creciente» desigualdad social, la crisis climática y las amenazas a la democracia y los derechos humanos.

A tenor de las declaraciones del Papa sobre estos temas, la reunión estará muy en sintonía. El pasado mes de octubre, Francisco abogó por «un salario universal, para que cada persona en este mundo pueda tener acceso a los bienes más básicos de la vida» y por «la reducción de la jornada laboral», como medida para un mayor acceso al trabajo para todos.
«Este sistema, con su implacable lógica del beneficio, está escapando a todo control humano. Es hora de parar la locomotora, una locomotora incontrolada que nos está llevando al abismo. Todavía estamos a tiempo», dijo el pontífice en un mensaje con motivo del IV Encuentro Mundial de Movimientos Populares.

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Meses antes, en abril de 2020, Francisco tuvo que defenderse de las acusaciones de sectores ultraconservadores. Llegó a decir que cuidar a los pobres, estar con ellos «no es ser comunista». «Este es el núcleo del Evangelio: seremos juzgados por esto», añadió.

Pedro Sánchez mantuvo una audiencia privada con el Papa en octubre de 2020. La reunión duró unos 35 minutos y en ella hubo «cordialidad» y «complicidad», según fuentes conocedoras del encuentro.

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