Los Mossos d’Esquadra han detenido a un vigilante de seguridad, experto tirador y con licencia de armas, que planeaba matar al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, por la exhumación de los restos de Franco y que tenía en su casa un arsenal de armas.
El arrestado, que frecuentaba ambientes ultraderechistas, fue denunciado por una usuaria de un chat privado de Whatsapp en el que participaba Manuel M.S. al ver que solicitaba apoyo logístico para cometer el atentado, para obtener la agenda de actos del presidente y su localización concreta. En este grupo de chat, el detenido afirmaba querer acabar con ese “rojo de mierda” y no importarle ser capturado después: “Estoy dispuesto a sacrificarme por España”.
En el registro de su domicilio, el 19 de septiembre, se localizó un fusil de asalto militar Cetme, un subfusil ametrallador Skorpion vz. 61, y cuatro rifles de precisión, además de que en el coche guardaba dos pistolas, una modificada e ilegal.
Investigado por conspiración
El Juzgado de Instrucción 3 de Terrassa (Barcelona) tiene abierta una causa contra el tirador por los delitos de conspiración para atentar contra autoridad con uso de arma, delito de amenazas graves, delito de tenencia ilícita y depósito de armas, municiones y explosivos y un delito de odio.
Según ha informado este jueves el Tribunal Superior de Justicia de Catalunya (TSJC), el Juzgado de Instrucción 4 de Terrassa, en funciones de guardia, acordó el 21 de septiembre enviar a prisión provisional al detenido por los Mossos d’Esquadra el 19 de septiembre por unas supuestas amenazas a Sánchez.
El 4 de octubre, el Juzgado de Instrucción 3 de Terrassa, que instruye el caso, ratificó la prisión provisional comunicada y sin fianza; y mantiene la causa abierta por los citados delitos.
Moncloa asegura que Sánchez nunca corrió peligro
Desde el Gobierno, los hechos han sido confirmados este jueves y han asegurado que “en ningún caso se ha visto comprometida la seguridad del presidente”, según publica el diario Público.
Según las fuentes del citado diario, Moncloa afirma que recibir este tipo de amenazas “es una constante” a la que “no debemos acostumbrarnos” y las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado están para combatirlas, de manera que restan relevancia al asunto, por lo que no le dieron publicidad al conocer los hechos hace semanas.
Numerosas muestras de solidaridad han sido recibidas por el Gobierno desde que se ha conocido el caso este jueves, afirman desde Moncloa, y envían un mensaje de tranquilidad recalcando que “es necesario seguir trabajando por la serenidad en el debate político”. (Postdigital/Agencias)