El presupuesto del Ministerio de Defensa para el año 2018 sube un 6,9 por ciento respecto al ejercicio anterior y supera los 8.000 millones de euros, según el proyecto de cuentas públicas presentado este martes en el Congreso por el ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro.
En el proyecto de Presupuestos, el Ministerio recuerda que estos pagos se realizan después de un «importante» proceso de reprogramación del coste que conllevan los denominados PEAs, que ha supuesto reducción de unidades, aplazamiento de entregas, renegociación de condiciones y venta de material.
En cualquier caso, el Gobierno subraya que esta cuantía no tiene impacto en el déficit público de 2018 al tratarse de entregas realizadas en ejercicios anteriores.
Con ello, la inversiones reales se encuentran por encima de los 2.600 millones, lo que supone un incremento del 18 por ciento respecto al ejercicio anterior. El Ministerio explica que con esta dotación se pretende atender las necesidades «más prioritarias» de los programas de armamento para dotar a las Fuerzas Armadas del material necesario para asegurar su funcionamiento.
DESARROLLO DE LA CULTURA DE DEFENSA
El objetivo se orienta tanto a garantizar la seguridad y bienestar de los ciudadanos como al desarrollo de la cultura de defensa en el que está implicada Cospedal y que tiene la finalidad de que la sociedad «conozca, valore y se identifique con su historia y el esfuerzo solidario y efectivo mediante el que las Fuerzas Armadas salvaguardan los intereses nacionales».
En cuanto a las infraestructuras, el Ministerio apunta su compromiso con el ahorro a partir de la gestión de recursos propios, mejorando la gestión del patrimonio de inmuebles. Y se compromete a continuar con actuaciones ambientales para concienciar a su personal, el ahorro de agua y energía, la reducción de emisiones y la mejora de eficiencia energética.