Los correos electrónicos de Álvaro Lapuerta, extesorero del Partido Popular, y de Cristóbal Páez, exgerente del partido, mientras trabajaron para la organización habían sido borrados de los ordenadores de la sede del PP en la calle Génova de Madrid cuando la Policía acudió allí el pasado jueves para llevar a cabo un registro de las instalaciones.
El registro, que se prolongó durante 14 horas, fue realizado por los agentes de la Unidad de Delincuencia Económica y Fiscal (UDEF) a requerimiento del juez Ruz, con la finalidad de recabar información sobre las irregulares obras de reforma del edificio de la sede del PP, acometidas por la empresa Unifica entre 2005 y 2011, y la contabilidad B del Partido Popular destapada por el extesorero Luis Bárcenas.
La prioridad en el registro era hallar los mensajes de las cuentas de correo de Lapuerta y Páez, así como los de Bárcenas, pero, según el acta de requerimiento levantada por el secretario judicial del Juzgado Central de Instrucción número 5, cuando los agentes intentaron acceder a esos datos se encontraron con que ya no existían ni para Lapuerta ni para Páez porque, para ambos, “su buzón de correo aparece borrado”.
El acta también recoge que ni Lapuerta ni Páez pudieron haber borrado personalmente el contenido de sus cuentas de correo, por lo que, en caso de ser los responsables de la desaparición de la supuesta documentación comprometedora, debieron haberlo pedido explícitamente.
Ante las preguntas de los agentes policiales, los representantes del Partido Popular que se encontraban en el lugar expresaron que “ninguna persona de la actual gerencia ni tesorería” había ordenado la destrucción de las pruebas y señalaron a los titulares de las cuentas de correo como los autores porque “tenían funciones para ello” y sería “lo lógico”.
Sin embargo, las cuentas de correo de Luis Bárcenas sí pudieron hallarse. En concreto, dos cuentas vinculadas al extesorero con los nombres “lbarcenas” y “lbg”, en las que, según el acta, “no aparece ningún correo electrónico relevante a los fines de la investigación”.
La Policía también se hizo con un total de 18 correos del cuñado de Bárcenas, exjefe de Seguridad del partido que se encargó del seguimiento de las comprometidas obras de reforma de la sede, y se revisaron los correos pertenecientes a otros empleados del centro, entre ellos la antigua secretaria de Bárcenas, pero también sin relevancia para la investigación.
Sobre la renovación del edificio de la sede del PP, los agentes de la UDEF realizaron copia de más de 5.000 folios de documentación relacionada con las obras entre los que se encuentran presupuestos, facturas, proyectos de ejecución y certificaciones de obra.
No es la primera vez que se elimina material informático del Partido Popular para impedir el éxito de la investigación en el caso de la supuesta corrupción generalizada en el partido y denunciada por su extesorero: el contenido de los famosos ordenadores de Bárcenas que el partido entregó al juez Ruz había sido también previamente borrado. Sin embargo, Mariano Rajoy siempre ha insistido en su intención de colaborar con la justicia para esclarecer el caso.