Aunque Pablo Iglesias ha remarcado que la nueva formación no es el verdadero rival de los morados, el líder de Podemos ha criticado que Iñigo Errejón aparezca como posible aliado del PSOE.
«No nacimos para apuntalar el bipartidismo y procurar el sueño plácido de los poderosos», ha reprochado Iglesias después de las afirmaciones de Errejón y otros miembros en las que dejaban entrever que ellos sí hubieran aceptado el acuerdo que le propuso el Gobierno en funciones.
«Los poderes no respetan la institucionalidad cuando los ciudadanos votan de manera distinta a lo que los poderes querrían. La institucionalidad sería que hubiera habido coalición» tras los últimos procesos electorales. «Pero cuando la gente vota para que una formación como la nuestra pueda estar en el Gobierno y poner límites democráticos a los poderosos, la institucionalidad no funciona. Van a hacer todo lo posible para que nos vaya mal. Cuando la gente vota otra cosa surgen las cloacas y las campañas a favor de quienes pueden debilitarnos»
En la misma línea, Iglesias se ha desmarcado ya de ser un apoyo de los socialistas, ya que Podemos no nación “para decidir si el Gobierno es del PP o del PSOE”.