

Alrededor de una decena de personas acompañaban en la tarde de este sábado a Elvira Murcia, que, encadenada al Palau de la Generalitat Valenciana, se disponía a pasar su segunda noche a la intemperie en su silla de ruedas.
Elvira, aquejada de osteogénesis imperfecta desde su nacimiento (conocida coloquialmente como enfermedad de los huesos de cristal), comenzó su protesta en la mañana del viernes, tras el acto de celebración del sexto aniversario de la Ley de Dependencia.
Aprobada en 2006 en el Parlamento, esta ley contaba con un calendario de implantación que debía desplegarse de forma gradual hasta 2015, de modo que fueran atendidas en primer lugar las situaciones más graves, seguidas posteriormente del resto. Sin embargo, una de las primeras medidas del actual Gobierno fue la decisión de paralizar el calendario de aplicación de la Ley, lo que suponía que casi 400.000 personas con dependencia moderada ya no pudieran acceder a una prestación o servicio.