El Parlament catalán logra investir presidente en el último momento e inicia el proceso independentista con las amenazas de Rajoy

En el último momento, a poco más de dos horas de que se acabara el plazo máximo permitido por ley, el Parlament catalán ha logrado investir este domingo a un presidente de la Generalitat: Carles Puigdemont, actual alcalde de Gerona procedente de CIU.

Artur Mas - Carles PuigdemontCon 63 votos en contra de Ciudananos, PP y SíQueEsPot, el nuevo presidente ha sido investido con los votos a favor 70 diputados, dos más de la mayoría absoluta: los 62 diputados de JxSí y 8 de la CUP, y la abstención de los otros dos miembros de la CUP, Gabriela Serra y Josep Manel Busqueta.

Puigdemont, que dejará la Alcaldía de Girona este lunes y deberá tomar posesión de su nuevo cargo en un máximo de cinco días, se ha comprometido en su intervención en el pleno de investidura a aplicar la declaración independentista que JxSí y CUP aprobaron el pasado 9 de noviembre, iniciando el proceso constituyente que culminará, según el plan, en 18 meses, cuando el nuevo texto constitucional sea votado en referéndum por la ciudadanía catalana.

«Tenemos que empezar a caminar a la luz de la declaración del 9N para iniciar el proceso de constitución de un estado independiente» a través de un nuevo Govern configurado en base al pacto al que han llegado JxSí y la CUP, ha destacado Puigdemont.

Puigdemont se ha referido a cinco ejes principales para esta legislatura: culminar el proceso en su fase participativa, ciudadana y asociativa, diseñar definitivamente las estructuras de Estado necesarias y «ponerlas a punto»; tramitar las leyes de transitoriedad jurídica y del proceso constituyente, e internacionalizar el proceso independentista.

Además, el todavía alcalde de Gerona, ha tenido palabras de especial agradecimiento a Artur Mas, apartado como candidato a la presidencia por la negativa de la CUP a investirlo, y ha asegurado que no habría aceptado ser candidato a la presidencia “si no supiera que tendrá al lado para todo lo que sea necesario” al expresidente de la Generalitat. “La culminación del proceso te necesita a ti y a tu prestigio”, ha dicho Puigdemont a Mas.

Amenazas de Rajoy

Una hora antes de que se produjera la votación y mientras se celebraba el pleno de investidura, el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, ha comparecido ante los medios para calificar el discurso de Carles Puigdemont de “basado en la ilegalidad” y de “repetición” del pronunciado por Artus Mas el pasado 9N, y ha avisado de que el Ejecutivo «no dejará pasar ni una» contra la unidad de España.

«El Gobierno no dejará pasar ni una sola actuación que suponga contravenir la unidad y la soberanía que vaya en contra de la ley y de las decisiones de los tribunales», ha proclamado.

«Tenemos más instrumentos que nunca para defender nuestra unidad; las principales fuerzas políticas estamos de acuerdo en ello», ha dicho Rajoy, quien ha informado de que ya ha hablado hoy con el líder socialista, Pedro Sánchez, y con el de Ciudadanos, Albert Rivera, y ambos le han dado su respaldo para que vele por que se respete la ley y la Constitución. También ha dicho haber intentado hablar con el líder de Podemos, Pablo Iglesias, pero que por ahora no ha podido hacerlo y espera ponerse en contacto con él mañana.

El presidente en funciones ha informado de que ha dado instrucciones para que cualquier actuación que pueda adoptarse por parte del nuevo Gobierno de Cataluña, de su presidente, de su Parlamento o de cualquier institución que suponga la vulneración de la Constitución y del ordenamiento jurídico sea estudiada para que tengan la respuesta del Estado de derecho con el fin de defender la democracia y la ley.

Rajoy ha aprovechado para recordar a los diputados del Parlament que «el Estado funciona siempre y que la democracia tiene la misma fortaleza de siempre, con independencia de que el Gobierno esté o no en funciones».

El presidente ha recordado también que el pasado 2 de diciembre el TC dictó que la resolución soberanista del 9 de noviembre ha sido anulada en todos sus efectos afirmando que es contraria al propio principio democrático, a la Constitución y al Estatuto de Autonomía de Cataluña. (Postdigital/Agencias)