Este lunes, la unión entre el PP y Vox volvió a dar sus frutos. Su pacto en La Consejería de Presidencia de la Junta de Castilla y León dio luz verde a la concesión de un total de 36 nuevos locales de juego en varias provincias de la región, que se construirán en los próximos tres años. En concreto, la Dirección General de Relaciones Institucionales, en manos del PP, concedió las nuevas licencias a la empresa Sportium Apuestas Oeste SA, filial de la empresa Sportium, según recoge el Boletín Oficial de Castilla y León (BOCYL).
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De esta forma, Castilla y León no sólo no frena la lucha contra la adicción al juego -una lacra entre las clases más bajas y desfavorecidas-, sino que sienta las bases para avanzar en esta enfermedad. Lo mismo puede decirse de Andalucía. La región castellana contará con una treintena de nuevos establecimientos de juego de aquí a 2026, concentrados principalmente en las provincias de Valladolid y Salamanca. Éstas concentrarán el mayor número de salones -siete y seis, respectivamente-, que comenzarán a construirse en el primer año. En concreto, se han autorizado 36 espacios diferentes, entre los que se encuentran las casas de juego.
