
Los familiares del maestro Dióscoro Galindo, asesinado al mismo tiempo que Federico García Lorca hace hoy justo 85 años, han recurrido al Tribunal Europeo de Derechos Humanos tras la decisión del Tribunal Constitucional de cerrar la puerta a una investigación para encontrar los restos del maestro y, y, en consecuencia, también las del poeta Federico García Lorca y las de dos guerrilleros anarquistas, Francisco Galadí y Joaquín Arcollas, asesinados la misma noche y en el mismo lugar de Granada. El Tribunal Constitucional subraya en su sentencia que no se trata de una cuestión de suficiente importancia para ser considerada.
La denuncia presentada ante el Tribunal de Estrasburgo afirma que los familiares del profesor fusilado han sido víctimas de una violación de sus derechos, de una discriminación y de una exclusión del proceso de investigación para localizar la fosa donde podrían estar sus restos, que según ellos podría estar en el Parque Federico García Lorca de Alfacar, en Granada.
La familia de Dióscoro Galindo quiere recuperar los restos para que no queden olvidados en una fosa anónima, una de las más de 700 que hay en Andalucía.
España es el segundo país del mundo -después de Camboya- con mayor número de fosas comunes sin abrir y de personas desaparecidas, según un informe del Grupo de Trabajo sobre Desapariciones Forzadas e Involuntarias de la ONU (2009 y 2014).