Los colectivos que integran la unión de sindicatos y asociaciones en defensa de la sanidad pública, denominados Marea Blanca y que ya consiguió el éxito en la paralización de la privatización de la gestión de 6 hospitales en la ciudad de Madrid, se volverá a poner en marcha mañana jueves a las 19.00 horas frente al Centro de Transfusiones. Se trata de la primera de una serie de movilizaciones que esta unión de colectivos realizará contra la privatización de la sangre, a la cual esperan que se sume gran parte de los ciudadanos residentes en la capital.
Los colectivos que integran la Marea Blanca consideran intolerable que Cruz Roja pretenda cobrar al Gobierno autonómico la desorbitada cifra de 67 euros por cada bolsa de sangre que la entidad privada entregue a cada uno de los hospitales públicos de la región, pagando con dinero público un servicio por el que Cruz Roja no paga a los ciudadanos, sino que estos la ofrecen voluntariamente en solidaridad con los enfermos.
La Marea Blanca también ha pedido a los ciudadanos que dejen de donar sangre en los puestos móviles que la Cruz Roja tiene en la ciudad de Madrid y que únicamente realicen donaciones en hospitales públicos, y desea transmitir a aquellas personas que donen sangre en los puestos de Cruz Roja, que tengan claro que la Cruz Roja no regala la sangre: la vende.
El lema con el que la Marea Blanca tomará las calles el jueves será «¡Mi sangre no se vende!» y el ya conocido de «La Sanidad no se vende, se defiende». Además, el sábado realizarán una segunda protesta en apoyo a los trabajadores del Centro de Transfusión de Vicálvaro, que se encuentran encerrados en el centro de transfusiones como protesta por la venta de la sangre, donde permanecerán hasta el sábado, día en el que saldrán a la calle en contra de la privatización del gesto solidario de la donación ciudadana.