Gracias a la labor de la Inspección de Trabajo, las empresas que tenían empleados con contratos temporales (irregulares) se convirtieron en contratos fijos.
En este caso, 82.400 puestos de trabajo fueron regularizados con una carta en la que se les advertía de que se había detectado una supuesta irregularidad. Este es sólo el comienzo del segundo plan de choque contra el trabajo temporal abusivo en 2021, que la autoridad laboral puso en marcha este mes de noviembre.
«En noviembre se puso en marcha un segundo plan de choque para regularizar los contratos temporales irregulares», respondió el Ministerio de Trabajo a preguntas de elDiario.es sobre las actuaciones de la Inspección en este ámbito.
El secretario de Estado de Empleo, Joaquín Pérez Rey, ha destacado este jueves por la mañana en el Senado que en lo que va de año la Inspección de Trabajo ha conseguido convertir «más de 267.000 contratos temporales fraudulentos» en indefinidos. «Un número impresionante de transformaciones», destacó la ‘número dos’ de la vicepresidencia y ministra de Trabajo, Yolanda Díaz.
Según el Ministerio de Trabajo, el número de conversiones de contratos temporales fraudulentos en contratos indefinidos en lo que va de año es «histórico». «Nunca se había alcanzado esta cifra», afirman.
Los llamados «planes de choque» de la Inspección de Trabajo contra la temporalidad abusiva se iniciaron en 2018, bajo el anterior Gobierno de Pedro Sánchez, cuando Magdalena Valerio estaba al frente del Ministerio de Trabajo. Desde entonces, el ministerio, ahora en manos de Yolanda Díaz, no sólo ha mantenido esta estrategia, sino que la ha intensificado.
«También es una capacidad del Estado y un bien público que contribuye a un crecimiento económico más estable y equitativo. Las inspecciones de trabajo y de hacienda llevan años, si no décadas, pidiendo más inversión y contratación en sus agencias», explica el analista Roy Cobby.