
Tal y como él mismo había anunciado con euforia en su perfil de la red social Twitter, el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, ha firmado este miércoles la orden ejecutiva que autoriza la construcción de un muro en la frontera con México, como había prometido durante su campaña electoral.
Big day planned on NATIONAL SECURITY tomorrow. Among many other things, we will build the wall!
— Donald J. Trump (@realDonaldTrump) 25 de enero de 2017
Además, durante la entrevista, Trump ha insistido en que la construcción del muro será “será de alguna forma reembolsada por México”, subrayando que obligará al país vecino a asumir el cien por cien de las obras, a pesar de que el presidente mexicano, Enrique Peña Nieto, ya negó esa posibilidad. Aunque no ha aclarado cómo pretende lograr eso, sí ha admitido que puede ser “complicado”.
Entre las órdenes ejecutivas firmadas por Trump este miércoles también se encuentra la de negar los fondos federales a las llamadas “ciudades santuario”, aquellas donde las autoridades se niegan a detener a inmigrantes indocumentados para su deportación. De este modo, se suprimirán fondos federales a las ciudades que se nieguen a proporcionar información sobre el estatus migratorio de las personas que detienen, entre las que se incluyen Chicago, Nueva York y Los Ángeles.
El anuncio coincide con la presencia en Washington del ministro mexicano de Relaciones Exteriores, Luis Videgaray, quien prepara una visita del presidente Enrique Peña Nieto, prevista para el fin de enero.
El ministro mexicano de Economía, Ildefonso Guajardo, también se encuentra en Washington, y al embarcar rumbo a Estados Unidos dijo a la prensa que «hay clarísimas líneas rojas que se tienen que pintar desde el principio». Consultado sobre si México abandonaría las conversaciones si el muro o las remesas están en la agenda, Guajardo respondió: «totalmente». (Postdigital/Agencias)