
El coste por hora trabajada subió un 0,2% en el tercer trimestre respecto al mismo periodo de 2020, según los datos publicados hoy por el Instituto Nacional de Estadística (INE). Entre ellos, los costes laborales -es decir, los salarios- aumentaron un 0,8%, tasa que contrasta con el aumento del 4% de la inflación interanual registrado a finales de diciembre.
Los datos preliminares del Índice de Coste Laboral Armonizado (ICLA) muestran que el coste por hora trabajada aumentó un 0,2% en el tercer trimestre de 2021 en comparación con el mismo periodo del año anterior. Excluyendo los efectos estacionales y de calendario, la variación anual es del 0,9%.
Por componentes de costes, los costes laborales registraron una variación anual ajustada del 0,8% y los otros costes aumentaron un 1,1%.
Las secciones con mayores incrementos anuales de los costes laborales en el tercer trimestre fueron información y comunicación (3,9%), actividades financieras y de seguros (3,0%) y hostelería (2,5%), según los datos del INE. Por otro lado, las mayores caídas se registraron en las actividades inmobiliarias (-6,8%), otros servicios (-4,8%) y educación (-4,2%).
El organismo estadístico afirma que la evolución de las distintas secciones de actividad refleja «el grado de consecución de la muy particular situación derivada de la pandemia y de las medidas puestas en marcha para contenerla». En general, durante el tercer trimestre, la incidencia del ERTE fue menor en todas las actividades económicas, lo que provocó un aumento de los costes laborales en la mayoría de ellas y, en menor medida, de otros costes, debido a las exenciones de las cotizaciones a la Seguridad Social.
En las actividades en las que las horas reales trabajadas aumentaron más que los costes, el coste por hora trabajada disminuyó.
Aumento de la inflación
Teniendo en cuenta estos matices, los datos de los costes laborales del tercer trimestre se comparan con un aumento de la inflación de hasta cinco veces superior en el mismo periodo: según los datos del INE, el índice de precios al consumo (IPC) registró una variación anual del 4,0% en septiembre, en gran parte debido a los precios de la energía.
La inflación también se aceleró más en octubre, alcanzando una tasa del 5,4%. En noviembre, el dato adelantado (que será ratificado por el INE a mediados de mes) ya era del 5,6%.
