
Esta reforma, adoptada por el Consejo de Ministros, prevé «medidas de gran calado» destinadas a promover una «migración regular ordenada y segura», ha dicho el ministro de Seguridad Social, José Luis Escrivá, en rueda de prensa.
En concreto, el texto facilita la regularización de los migrantes sin papeles que lleven más de dos años en territorio español. Quienes se encuentren en esta situación podrán acceder legalmente a un trabajo o a una formación en sectores en los que haya muchas vacantes.
La reforma también simplifica el acceso al empleo de los estudiantes extranjeros, que podrán trabajar hasta 30 horas semanales durante sus estudios e incluso incorporarse al mercado laboral después, sin tener que vivir antes tres años en España.
El nuevo reglamento también facilita la reagrupación familiar y la concesión de visados de trabajo en los sectores de actividad más demandados, simplificando y normalizando los procesos administrativos a seguir.
Estas medidas pretenden «mejorar el modelo migratorio español y sus procedimientos, que en muchos casos son lentos e inadecuados, lo que conlleva periodos prolongados de irregularidad, con elevados costes sociales y económicos», subrayó el ministerio.
