
Podemos defiende que el fondo de 11.000 millones de euros de apoyo a las empresas, que tiene previsto aprobar este martes el Consejo de Ministros, debería incluir al menos una partida de 8.000 millones en ayudas directas a las empresas afectadas por el covid-19.
Además, es «crucial» definir con claridad las características de estas ayudas para llegar «con eficacia y rapidez» al tejido de empresas con problemas de solvencia. Por ello, considera conveniente desarrollar instrumentos similares a los desplegados por otros países del entorno comunitario, «más centrados en la ayuda directa, mientras que la reestructuración de la deuda del ICO debería tener un papel más secundario».
Según un documento elaborado por la Vicepresidencia de Derechos Sociales, al que ha tenido acceso Europa Press, las ayudas directas a las empresas no deben darse por sectores, aún sabiendo que algunos han experimentado caídas de ingresos mucho «más pronunciadas que otros».
«Las ayudas directas deben ser accesibles para todas las empresas, independientemente del sector en el que operen, y la condición para acceder a ellas debe ser que la empresa tenga una caída drástica (30-40%) de su facturación en 2020 respecto a 2019», ha subrayado.
En el caso de las empresas que cumplen esta condición, Unidos Podemos cree que podrían acceder a cubrir hasta un determinado porcentaje de sus costes fijos (70-80%). En este sentido, el informe de la vicepresidencia que encabeza Pablo Iglesias señala que estas ayudas directas «no deben dirigirse a cubrir los costes variables de las empresas», pues ya existen otros instrumentos desarrollados para ello, como el ERTE.