
Las empresas que han tirado del dinero público para pagar las nóminas de sus ERTEs no pueden repartir dividendos entre sus accionistas. Así lo establece la Ley, pero una parte de los dueños de El Corte Inglés está presionando al Gobierno para que les permitan cobrar.
Según informa El Confidencial,aunque la ministra de trabajo lo ha desmentido, la directiva ha contactado tanto con Marta Calviño, ministra de Economía, como con Yolanda Díaz, ministra de Trabajo para conseguir la exención.
Fuentes oficiales del Ministerio de Trabajo consultado por Galiciapress indican que «no están al tanto» de ninguna llamada para este propósito. Además, acepta «la prohibición de distribuir dividendos para las empresas cubiertas por ERTE está contenida en el Real Decreto 18/2020 de extensión de ERTE, al que se aceptó El Corte Inglés».
UNA FUNDACIÓN DE CARIDAD CON INVERSIONES EN BANCOS Y EL GRUPO PRISA
El argumento del Corte Inglés para recibir para recibir dividendos es que el accionista principal, con casi el 38%, es la Fundación Areces. Su objetivo principal es «crear una estructura científica y tecnológica sólida en España que permita mejorar la vida de las personas».
La Fundación tiene una amplia cartera financiera de más de 10,5 millones de euros según las cuentas de 2017.
Así, la Fundación informa en sus últimas cuentas publicadas que tenía 7 millones de acciones en Banco Santander, 1.2 en BBVA, 1.04 en Iberdrola y una participación en uno de los grupos periodísticos con más peso en la formación de la opinión pública. Español, fecha prisa. Los activos de la Fundación Areces en Prisa perdieron el significado para la Fundación de más de 626,000 euros en ese momento.
De lo contrario, sería la primera vez que ECI suspende la distribución de dividendos. Dividendos que, a pesar del gasto financiero del grupo, fueron de 75 millones de euros el año pasado.