De hecho, el alcalde de Pamplona, Joseba Asiron, había anunciado que “con mensajes tránsfobos no va a entrar en la ciudad porque hay una normativa municipal que capacita al Ayuntamiento para evitar la entrada a un autobús con ese tipo de mensajes” y que solo podría entrar “en caso de que viniera un autobús anaranjado sin mensajes” y «respetando el resto de la normativa». El alcalde había avisado, además, de que la Policía iba a estar «muy vigilante» para que así fuera.
El objetivo del autobús era llegar a la sede del Parlamento de Navarra, institución ante la que la plataforma ultracatólica pretendía acudir para hacer entrega de un supuesto manifiesto “en defensa de la libertad de expresión”.
Frente al Parlamento se han concentrado a modo de protesta representantes de los grupos parlamentarios de Geroa Bai, EH Bildu, Podemos, PSN e Izquierda-Ezkerra. Allí también esperaban cientos de manifestantes contrarios a los mensajes transfóbicos de HazteOír que, convocados por el sindicato LAB, Bilgune Feminista y el movimiento LGTBI E28, portaban banderas arcoiris y pancartas con lemas como “Navarra: tierra de diversidad. No a la transfobia”, “Odio no es libertad de expresión” o “Ez zarete ongi etorriak” (No sois bienvenidos).