Alfonso Jesús Cabezuelo fue condenado a nueve años de prisión por abusar sexualmente en grupo, junto al resto de los miembros de ‘La Manada’, en los Sanfermines de 2016 pero salió en libertad provisional tras dos años tan solo a la espera de la resolución del Tribunal Supremo, que ha de revisar la sentencia, y ahora, además, ya puede volver al servicio activo como militar y cobrará su sueldo íntegro aunque no se le asigne destino.
Un “trámite administrativo”
Desde Defensa explican que se trata «simplemente de un trámite administrativo» porque ha pasado el plazo de seis meses preceptivo desde que se dictó la suspensión sin que haya condena firme contra él y por eso tiene derecho a solicitar que se levante la situación de suspensión de funciones.
Según el Reglamento de adquisición y pérdida de la condición de militar y situaciones administrativas de los militares profesionales, aprobado en 2015, «el pase a la situación de suspensión de funciones del militar profesional se podrá acordar como consecuencia del procesamiento, inculpación o adopción de alguna medida cautelar contra el imputado en un procedimiento penal o por la incoación de un procedimiento disciplinario por falta muy grave».
La norma establece que «el periodo máximo de permanencia en esta situación será de seis meses o el de la duración de la prisión preventiva, caso que se hubiere acordado por la autoridad judicial en algún momento del procedimiento y fuese superior a seis meses».
Defensa no asignará destino de momento
En un comunicado, el Ministerio de Defensa ha informado este miércoles de que “no se podía evitar” el alzamiento de la suspensión de funciones, pero no asignará destino a Cabezuelo, en aplicación del artículo 111.3 de la Ley de Carrera Militar.