Dolores de Cospedal ha remitido un escrito a sus delegaciones territoriales en Castilla la Mancha para que omitan la palabra “desahucio” en la información que se envía a las familias que van a ser desahuciadas.
La orden, emitida por el director general de Vivienda, responde a la mala imagen que dio el gobierno regional al enviar avisos de desahucio a 200 viviendas que son propiedad de la Junta de Castilla-La Mancha. Según la junta, esta noticia fue malentendida y ya ha sido “aclarada”, por lo cual ha dado orden de “evitar” la utilización de palabras como “desahucio”, “desalojo”, “alzamiento” y “pérdida o privación de su vivienda”.
La Plataforma de Afectados por las hipotecas (PAH) ha respondido a Cospedal con un tuit: «Nos vemos en la obligación de indicarle que prohibir el uso de una palabra no elimina la realidad. Dígale desahucio o crimen».
El escrito de Cospedal ordena a las delegaciones “sustituir por otras menos contundentes” las palabras prohibidas” y da como alternativa algunos eufemismos como: “el impago producirá todos los efectos previstos en la normativa”.
“Se omitirá toda referencia a que será desahuciado, lanzado de su vivienda, privado de ella”, insiste el escrito que, en mayúsculas, exige y ordena que modifiquen inmediatamente los formularios.