Alrededor de una veintena de personas han pasado la noche encerradas en la catedral de Granada como protesta contra la “condena política” de Carlos y Carmen, los dos granadinos del 15M que han sido condenados a tres años de cárcel por su participación en un piquete informativo y pacífico durante la jornada de huelga general del 29 de marzo de 2012.
El encierro ha tenido lugar tras la exitosa manifestación que ha recorrido las calles de Granada desde la subdelegación del Gobierno en la ciudad hasta las puertas de la Audiencia Provincial para exigir libertad para los condenados, en la que han participado unas 5000 personas según Stop Represión Granada.