España es el país europeo con mayor prevalencia de trastornos mentales entre niños y adolescentes de 10 a 19 años, según el último informe «Estado Mundial de la Infancia 2021», publicado por Unicef, que este año llama la atención sobre la salud mental de los niños y advierte de que no se está haciendo lo suficiente para afrontar esta situación.
El informe, basado en datos prepandémicos de 2019, estima que el 20,8% de los jóvenes de esta edad padecen trastornos mentales como depresión, ansiedad, trastorno bipolar, trastornos de la conducta, una forma de autismo, trastorno por déficit de atención o esquizofrenia, entre otros.
Unicef habla de 982.291 jóvenes en esta situación, con un porcentaje ligeramente superior en el caso de las niñas.
Después de España, Portugal (19,8% de niños adolescentes), Irlanda (19,4%), Suiza (18,7%) y Austria y Noruega (18,2%) son los países con mayor prevalencia de trastornos mentales en este grupo de edad; los países con menores porcentajes son Polonia, República Checa, Hungría, Rumanía, Bulgaria y Eslovaquia.
Según estos datos, la prevalencia de este tipo de trastornos en España es 5 puntos superior a la media europea del 16,3% y 8 puntos superior a la media mundial del 13,2%.
«La pandemia del covid-19 ha causado una gran preocupación por la salud mental de una generación de niños. Sin embargo, la pandemia puede ser sólo la punta del iceberg de la salud mental, que hemos descuidado durante demasiado tiempo», afirma el Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia en el informe publicado hoy.
El informe también analiza el suicidio, señalando que es la segunda causa de muerte entre los jóvenes de 15 a 19 años, solo superada por los accidentes de tráfico, y que casi 1.200 niños de 10 a 19 años se quitaron la vida en Europa en 2019.
El suicidio afecta más a los chicos, y especialmente a los adolescentes: el 71% de los que se suicidaron en el grupo de edad de 15 a 19 años eran chicos, y el 59% en el grupo de 10 a 14 años.
En cuanto al tipo de trastorno, los trastornos de ansiedad y depresión afectan más a las chicas: representan el 70,1% de los trastornos que sufren las chicas de 10 a 19 años, mientras que en el caso de los chicos esta cifra se reduce al 39,9%.
Entre las niñas, los trastornos de conducta (13%), el déficit de atención e hiperactividad (10,4%) y los trastornos alimentarios (5%) son los más frecuentes.
Entre los jóvenes, a la ansiedad le siguen el déficit de atención e hiperactividad (28,6%), los trastornos de conducta (23,1%) y los relacionados con el autismo (6,1%).
Unicef subraya la necesidad de invertir en comunicación para acabar con el «estigma» y «romper el silencio en torno a la salud mental y garantizar que se escuchen las voces de los jóvenes, especialmente de aquellos que han sufrido problemas de salud mental».
«Necesitamos escuelas que atiendan las necesidades sociales y emocionales de los niños; tenemos que sacar la salud mental de su «silo» en los sistemas de salud y atender las necesidades de los niños, los jóvenes y los cuidadores en diversos contextos, como la crianza de los hijos, la educación, la atención primaria de salud, la protección social y la respuesta humanitaria», dice el informe.