
El PSOE y Unidas Podemos han pactado una enmienda a la Ley de Memoria Democrática, que se ha registrado este miércoles al límite del plazo en el Congreso, en la que buscan una fórmula para superar la Ley de Amnistía de 1977 sin derogarla, algo que los socialistas rechazaban de plano y que reclamaba ERC. El texto, registrado de manera conjunta por PSOE y Unidas Podemos, pretende forzar una interpretación distinta en el futuro de aquella ley de la Transición para evitar que dejen de ser impunes los crímenes franquistas. Los socios del Gobierno negociarán ahora con ERC y PNV para que se sumen a la aprobación de la ley de memoria. El pacto contempla que el Valle de los Caídos pase a llamarse solo el Valle de Cuelgamuros. El acuerdo se ha alcanzado a tres días del 20-N y 46 años después de la muerte de Franco.
La enmienda pactada in extremis entre PSOE y Unidas Podemos señala literalmente: “Todas las leyes del Estado español, incluida la Ley 46/1977, de 15 de octubre, de Amnistía, se interpretarán y aplicarán de conformidad con el Derecho internacional convencional y consuetudinario y, en particular, con el Derecho Internacional Humanitario, según el cual los crímenes de guerra, de lesa humanidad, genocidio y tortura tienen la consideración de imprescriptibles y no amnistiables”.
Este cambio en la interpretación de dicha norma abre la puerta a que los crímenes del franquismo puedan ser perseguidos en la justicia española. Hasta ahora, cualquier intento de hacerlo —como las iniciativas que trató de sacar adelante el juez Baltasar Garzón— chocaba con el muro de la Ley de Amnistía de 1977, una norma que fue pensada y utilizada para sacar a la calle a los presos políticos del franquismo, pero que después también sirvió como parapeto para frenar cualquier intento de procesar a responsables franquistas por cuestiones sucedidas antes de 1977.
De hecho, hasta el momento solo se han promovido, y sin éxito, estos procesos en Argentina. Fuentes de Unidas Podemos señalan que no es sensato anular la Ley de Amnistía, como pide ERC, entre otras cosas porque esa norma fue una gran conquista de los demócratas, pero sí se puede encauzar su interpretación para que los tribunales no la vuelvan a usar como parapeto frente a los crímenes franquistas. Aun así, habrá que ver qué efecto real tiene ahora en esos tribunales, porque el Supremo ha sentado una jurisprudencia muy clara en contra de cualquier procesamiento de los crímenes franquistas.
“Después de tantos años de la muerte del dictador estamos dando pasos muy sólidos para que sus crímenes salgan de la impunidad. Es sin duda la última oportunidad de nuestro país después de tantos años. Es el único país occidental donde la impunidad ha sido la tónica ante este tipo de crímenes. Es un día para estar satisfechos”, ha dicho Enrique Santiago, secretario de Estado de Agenda 2030 y secretario general del PCE, y uno de los negociadores de esta enmienda que de momento no es suficiente para ERC, que quiere ir más allá, pero supone un paso muy importante y hasta ahora impensable.
En realidad, la enmienda lo que haría es cambiar por completo la interpretación que han mantenido hasta ahora todos los tribunales. “Se va a corregir la interpretación de los tribunales, la Ley de Amnistía no podrá ser utilizada más como una excusa”, ha señalado Santiago, que, sin embargo, ha admitido que el paso del tiempo hará que esto no tenga grandes efectos jurídicos concretos, pero sí morales y reparadores para las familias de las víctimas.
“La muerte extingue la responsabilidad penal. La mayoría de los responsables están muertos. Pero al menos se acaba con una anomalía en nuestro país. Cualquier ministro franquista o cualquier persona que haya cometido torturas podrán ser juzgados”, ha señalado el secretario general del PCE y diputado de Podemos. “Al margen de que se pueda o no sancionar, sí se puede establecer una verdad judicial, y eso en sí mismo sí tiene un efecto reparador para las víctimas”, ha explicado. Preguntado sobre por qué el PSOE ha aceptado cambiar esta interpretación de la Ley de Amnistía sin derogarla, ha respondido: “Todos hemos sido muy conscientes de que esta era la última oportunidad”.
Unidas Podemos y PSOE han registrado hasta 30 enmiendas conjuntas al proyecto de Ley de Memoria Democrática, que incluyen varias modificaciones importantes. “Se cambiará la denominación de Valle de los Caídos a Valle de Cuelgamuros, recuperando el nombre original. Además, los retratos u otras representaciones artísticas de personas vinculadas a la represión franquista no podrán mostrarse ni en lugares representativos ni en áreas de acceso al público y se completa el procedimiento para la revocación de las distinciones honoríficas en los cuerpos y fuerzas de seguridad del Estado y se suprimen los títulos nobiliarios concedidos a 33 personajes del régimen franquista, como los ducados de Primo de Rivera, Calvo Sotelo o Queipo de Llano”, explica Unidas Podemos.
Fuentes de la dirección de ERC en el Congreso, sin embargo, aún ven “insuficientes” los cambios promovidos por los dos socios del Ejecutivo, aunque admiten que sí están dispuestos a negociar ahora en el trámite parlamentario. Para ERC, la declaración de ilegalidad del régimen franquista es un punto innegociable.