El Fiscalía ha afirmado este lunes en la presentación de su informe de conclusiones en el juicio por violación al grupo de los Sanfermines, conocido como ‘La Manada’, que los hechos «se produjeron sin consentimiento y bajo violencia e intimidación», y ha considerado que «las pruebas son absolutamente contundentes».
La fiscal ha hecho un relato pormenorizado de cómo ocurrieron los hechos a su entender desde que la joven se encontró con los cinco acusados y hasta que estos fueron detenidos. «Ha quedado perfectamente acreditado el daño moral y que la víctima ha tenido sufrimiento moral», ha dicho.
“La cogieron de forma sorpresiva, no sabía ni en sus peores pesadillas lo que iba a pasar”, ha expuesto la fiscal, que ha señalado que “sí hubo violencia, mínima pero la hubo, agarrándola para introducirla en el porta, tapándole la boca, se utilizó la fuerza necesaria”.
Por el contrario, la fiscal considera que «es absolutamente coherente desde el principio hasta el final la declaración de la denunciante» y ha afirmado que en ella no hay «ningún tipo de contradicción». «Es un testimonio ajustado a la verdad, no hay exageración; no exagera nada de lo que ocurrió», ha manifestado, para añadir que hay «coincidencia» entre la narración de la joven y los vídeos: «Mantuvo una actitud pasiva, de no resistirse, eso es lo que se ve».
“En ningún momento tuvo una actitud activa, estaba con los ojos cerrados, no había ningún signo de que hubiera participación, ni una sonrisa, ni un gesto ni una palabra”, una actitud que, según los peritos forenses, “no es una reacción extraña sino una reacción propia de una persona en esa situación”.
En cuanto a las conversaciones en los audios de los vídeos grabados por los procesados, la fiscal explica que “se oyen dos tipos de conversaciones: las que se dirigen entre ellos, que son de colaboración, y las que dirigen a la víctima, que son imperativas, sin ningún tipo de interactuación”. “Todas las conversaciones eran entre varones, ninguna palabra pertenece a la víctima”, continúa la fiscal, que afirma que “ellos deciden lo que hacen, lo que tiene que hacer la víctima”.
Sobre la declaración de los acusados, la fiscal ha señalado que la primera se produjo dos meses después de que ocurrieran los hechos, lo que a su juicio motivó que se la «prepararon» para «coincidir». «Se han tratado de preparar pero no lo han conseguido en modo alguno».
La fiscal ha abierto así este lunes las sesiones del juicio dedicadas a las conclusiones de las partes. Tras este primer informe, es el turno de la acusación particular y posteriormente será el de las acusaciones populares, ejercidas por el Ayuntamiento de Pamplona y la Comunidad foral.
El martes presentarán las conclusiones las tres defensas de los cinco acusados. Estas dos últimas sesiones del juicio son las únicas que se desarrollan en audiencia pública, con la asistencia de 46 periodistas y 24 ciudadanos como público. No obstante, está prohibido el acceso de cámaras y fotógrafos y el tribunal ha adoptado medidas extraordinarias para evitar grabaciones. (Postdigital/Agencias)