
Los trabajadores de Tragsa han emitido hoy, tras la reunión del comité de empresa, un comunicado que da al traste con el ultimátum dado por la alcaldesa de Madrid, Ana Botella, a los empleados de las empresas privadas de recogida de basuras que se encuentran en huelga desde el pasado cinco de noviembre.
El ultimátum de la alcaldesa pretendía hacer presión sobre los huelguistas indicando que si, en el plazo de 48 horas a partir del aviso, no se alcanzaba un acuerdo por el que los trabajadores se hicieran cargo de la recogida de basuras y limpieza de la ciudad, la tarea le sería encomendada a la empresa pública Tragsa.
Sin embargo, los empleados de Tragsa han decidido prestar su apoyo a los huelguistas y negarse a cumplir las órdenes de Ana Botella, tal y como han explicado en el siguiente comunicado oficial: