
Miles de personas han tomado este domingo el centro de Madrid para reivindicar que la vivienda es un derecho y no un negocio, poniendo el foco en el elevado precio de los alquileres.En la concentración se han escuchado lemas de todo tipo como «No llegamos a fin de mes. Si no bajan los precios, huelga de alquiler» o «Casa, hogar y planeta donde habitar». En los últimos años, el número de grandes propietarios ha aumentado un 20%. El mercado se concentra y cada vez es más difícil ser propietario. Sobre todo en las grandes ciudades, por ejemplo, en Madrid, siete de cada diez inquilinos jamás podrá comprar una casa.
Alrededor de 150.000 manifestantes, según los organizadores (22.000 según la Delegación del Gobierno), tomaron las principales calles de Madrid para exigir soluciones a un problema que está en el centro de las preocupaciones de los españoles, especialmente de los jóvenes.
Los manifestantes respondieron al llamamiento promovido por medio centenar de asociaciones de vecinos, sindicatos de inquilinos, plataformas de vivienda y alquiler, sociedad civil en general y también organizaciones ecologistas. Entre las reivindicaciones figuraban la regulación del precio de los alquileres, la ampliación de la ley de vivienda, el aumento de los alquileres sociales, el fin de los pisos turísticos e incluso la exigencia de no pagar alquiler como protesta por la tensa situación que se vive en las grandes ciudades.