Según ha informado elpais.com, el hombre de 57 años que este miércoles fue hallado envuelto en llamas a lo bonzo en plena calle junto al hospital Carlos Haya de Málaga ha fallecido. Tenía quemaduras en el 80% de su cuerpo y sufrió un fallo multiorgánico, según han informado fuentes sanitarias.
La víctima, por el testimonio de los que le conocían, se había dedicado durante años a la construcción, aunque en los últimos meses estaba trabajando como aparcacoches ilegal en las inmediaciones del lugar de los hechos.
El miércoles, sobre las seis de la tarde, el individuo compró una cajetilla de tabaco y un encendedor en el quiosco situado en la entrada principal del centro sanitario. El vendedor de prensa, Francisco Nieto, que le trataba con frecuencia, le preguntó si se encontraba bien y el cliente respondió que estaba agobiado por las deudas económicas.
Apenas dos minutos después fue hallado envuelto en llamas en la calle de Ciprés, un lateral del hospital. Varios taxistas fueron los primeros en auxiliar, con los extintores de sus coches, al herido.
El hombre ingresó en el centro sanitario Carlos Haya de Málaga, pero horas después fue desviado a la Unidad de grandes quemados del hospital Virgen del Rocío de Sevilla, donde finalmente murió a última hora del jueves.
La policía continúa investigando el suceso. Los agentes no descartan ninguna hipótesis. Por una parte, la posibilidad de que se prendiera fuego a lo bonzo, y, por otra que se tratara de un accidente cuando iba a encender un cigarrillo. Los agentes no han logrado aún localizar a los familiares.