Siguiendo con la inclinación privatizadora del PP, la secretaria de Estado de Educación, Montserrat Gomendio, ha expresado hoy su apuesta por un cambio de modelo en la educación superior, sugiriendo que el ministerio dirigido por José Ignacio Wert estaría estudiando la eliminación de las becas a estudiantes universitarios, que serían sustituidas por préstamos a devolver cuando el alumno hubiera encontrado un empleo, lo que supondría endeudarse de partida para poder formarse en un país en el que el índice de paro juvenil está por encima del 50%.
Gomendio también ha defendido un cambio de modelo en la retribución de los profesores, señalando que el sueldo de los docentes está “por encima de la media europea” y que deberían cobrar según sus méritos en la formación de sus alumnos. Además, ha apostado por el aumento de la financiación privada de las universidades mediante contratos con empresas, algo, según ella, “muy importante”.
El Ministerio de Educación se ha desmarcado posteriormente de sus palabras, asegurando que esa consideración no está sobre la mesa y que “lo que Montserrat Gomendio ha afirmado es que no debería ser un tema tabú hablar sobre la financiación universitaria”.
La secretaria de Estado de Educación, Formación Profesional y Universidades, Montserrat Gomendio, ha planteado este viernes si la Universidad debe evolucionar de un sistema de becas hacia otro de préstamos, y si la financiación universitaria debería tener un componente privado mayor.
En un desayuno informativo de la tribuna Fórum Europa, donde ha sido presentada por el rector de la UIMP, César Nombela, Gomendio se ha preguntado si se debe seguir con un sistema de becas donde los estudiantes reciben unas cuantías importantes de dinero que no tienen que devolver o evolucionar hacia un sistema de préstamos.
Ha puesto como ejemplo el sistema universitario británico, donde tienen que devolver —»en cómodos plazos y sin intereses»— el dinero aquellos alumnos que han conseguido después un empleo que les supone más de 21.000 libras al año.
Ha señalado que el sistema universitario ha crecido exponencialmente en los últimos años, suponiendo un coste «muy elevado»; «no es cuestión de gratuito o no, sino de quién lo paga, cómo y cuándo», según Gomendio.
El debate es plantear —ha continuado— si en el ámbito universitario todas las familias contribuyen a que los alumnos vayan a la Universidad de forma gratuita o el otro extremo, si son los universitarios los que paguen una mayor proporción de ese coste al ser los «beneficiarios directos» de dicha educación y de un mejor nivel de empleabilidad después.
«El Ministerio no ha tomado ninguna decisión al respecto pero es una de las cuestiones que tenemos que valorar», ha añadido Gomendio.
Apuesta por la financiación privada de las universidades
Además, Gomendio ha considerado «muy importante» que en la Universidad crezca la proporción de financiación privada, con contratos de empresas y cátedras patrocinadas por instituciones privadas.
En España hay 82 universidades —en los últimos años se ha creado una por año—, hay cerca de 7.000 titulaciones y 1,5 millones de alumnos, por lo que ha concluido que el número de las primeras es «muy elevada».
Gomendio ha abogado por compensar el «desajuste» entre alumnos en universidades y en Formación Profesional modernizando ésta, tal y como se pretende con la Ley Orgánica para la Mejora de la Calidad Educativa (Lomce).
También ha apostado por crear «una verdadera carrera docente» en la que se reconozcan los méritos —incentivos de sueldo pero también de cargo— de los profesores que «sacan lo mejor» de sus alumnos. Ha comentado que el salario de nuestros profesores está por encima de la media europea y que con ello no quiere decir que sea «demasiado alto», sino que aumentar sueldos no es «la solución» en educación. (EFE)