En el pleno del Ayuntamiento de Toledo el alcalde, del PSOE, da el turno de palabra a una vecina. Y concejales del PP se van. Uno, incluso, llega a encararse con un ciudadano, acusándole de insultarle. En la tribuna, la mujer que tenía que hablar es madre de una niña con cáncer. Quiere denunciar la falta de personal y medios en el hospital de Toledo.
A la vez, otros padres de menores enfermos entregan un comunicado a los concejales que abandonan la sala, incluso entre lágrimas, como uno que le dice a una edil que su hija lleva cinco años en tratamiento. Ella le contesta: “Le entendemos”, a lo que el padre le increpa, mientras la concejala sale por la puerta: “¿Lo entendéis? ¿Y por qué os vais?”.
Este viernes el PP se defiende: alega que no sabía quién iba a hablar y que el público estaba insultándoles. La portavoz del PP en el ayuntamiento de Toledo, Claudia Alonso, dice que el alcalde jaleó a personas para que insultaran a los concejales del PP. Pero una concejala popular, Ana Isabel Bejarano, se quedó. Ella sí escuchó a Maria Luisa, cuando decía que sus hijos no tienen tiempo porque “el cáncer que padecen no entiende de tiempos ni de esperas”.
Denuncia que el hospital de día sólo atiende a los niños hasta las tres de la tarde, que el personal no da a basto, y que trasladan a sus hijos a otras comunidades. Este jueves su dolor conmovió a todos los que estaban en el pleno, los que se quedaron a escucharla.