El pasado sábado, el Boletín Oficial del Estado publicó el Real Decreto-ley 28/2012, de medidas de consolidación y garantía del sistema de la Seguridad Social, que introducía una modificación del artículo 94 de la Ley de garantías y uso racional de los medicamentos y productos sanitarios, relativo a las aportaciones de los usuarios.
El Real Decreto-Ley aprobado el pasado viernes por el Consejo de Ministros para modificar las pensiones también ha introducido un cambio en la Ley del Medicamento por la que se establece que los medicamentos que se administran en las farmacias de los hospitales mediante orden de dispensación hospitalaria se equiparan a los que se administran a través de receta médica y, por tanto, podrían estar sujetos al repago.
De este modo, al ampliar el concepto de prestación farmacéutica ambulatoria se estaría también ampliando el abanico de medicamentos «sujetos a aportación del usuario», el llamado repago farmacéutico.
Fármacos contra el cáncer o la artritis que necesitan orden hospitalaria
«La prestación farmacéutica ambulatoria estará sujeta a aportación del usuario», explica el articulado tras su última modificación, para luego detallar los porcentajes de repago según la renta del ciudadano.
Entre los medicamentos que requieren orden de dispensación hospitalaria están algunos tratamientos contra el cáncer, la hepatitis C, la artritis reumatoide, la psoriasis, la esclerosis múltiple o numerosas enfermedades raras.
Debemos impedir que se aplique en las comunidades autónomas esta disposición adicional, un auténtico “decretazo” que atenta a la salud de las personas con Fibrosis Quística cuanto menor sean sus posibilidades económicas. Es el momento de estar más unidos que nunca, de acordar acciones coordinadas con todas las personas y entidades, para que se oiga el clamor de las enfermedades que siendo minoritarias afectan a muchas personas.
Precisamente el Gobierno ha declarado recientemente 2013 Año de las Enfermedades Raras, y, tan solo unas semanas después, publica este real decreto que rompe una tradición que los gobiernos de las dos últimas décadas han respetado. Mal comienzo de un año que en teoría está dedicado a nosotros.
En los próximos días, desde la Junta Directiva os iremos informando de las acciones que podemos emprender. Le pediremos urgentemente una entrevista a la Ministra de Sanidad para pedirle que se no se aplique esta disposición, y aclare sus intenciones, pero seguramente será necesaria la movilización de todos para hacer visible nuestro descontento. Pedimos que no se quite lo que ya teníamos. Si va nuestra salud en ello estamos en la obligación de exigirlo.
Recibid un cordial saludo.