Se puede decir más alto pero no más claro: Europa rechaza el “impuesto al sol” del Mariano Rajoy y no acepta que los países de la UE puedan imponer costes a los ciudadanos por la energía que ellos mismos produzcan y almacenen.
Fomento del autoconsumo no sujeto a impuestos, tasas o tributos
El texto aprobado contiene un apartado sobre el autoconsumo, apostando por su impulso en los estados de la UE e instando a los gobiernos a «garantizar que los consumidores tengan derecho a convertirse en autoconsumidores de energías renovables».
Preguntado por el futuro de esta enmienda en las negociaciones con los socios comunitarios, Blanco ha confiado en contar con el apoyo de la Comisión Europea y ha advertido de que la Eurocámara no renunciará, dado el apoyo que ha recibido esta parte del texto.
Críticas desde Greenpeace
La organización ecologista Greenpeace ha valorado positivamente que el Parlamento Europeo “pida normas para ilegalizar los abusos como el ‘impuesto al sol’ de España», pero se muestra crítica con las otras decisiones de la institución europea, que considera insuficientes.
“Es una buena noticia que el Parlamento europeo haya reconocido que la Unión debe impulsar las energías renovables para cumplir sus compromisos climáticos, pero debería haberse ceñido a las soluciones reales y no incluir las fuentes y usos insostenibles de bioenergía”, ha declarado Sara Pizzinato, responsable de la campaña de energía de Greenpeace.
“A diferencia del Ejecutivo español, aún atrapado en subvencionar el carbón y la energía nuclear, el Parlamento europeo respalda firmemente el derecho ciudadano a generar, consumir y vender la electricidad autoconsumida y producida con el sol y el viento. Un mensaje claro para España y su “impuesto al Sol”.
«El PP, contra todos (incluidos los conservadores europeos), a favor del impuesto al sol en Europa» por @pizzina78 https://t.co/E3wVVSKroW pic.twitter.com/K9aYtRY5xd
— Greenpeace España (@greenpeace_esp) 18 de enero de 2018
Si bien Greenpeace está de acuerdo en que el objetivo del 27% en renovables actual es insuficiente, considera que debería incrementarse más allá del 35%, al 45%, y lamenta que la decisión no haga la medida vinculante para los estados miembros. La organización también critica que “las fuentes y usos insostenibles de bioenergía aún cuenten para alcanzar el objetivo renovable”.
“El Parlamento Europeo ha respaldado hoy seguir usando fuentes insostenibles de bioenergía en la UE. Su propuesta, por ejemplo, permitiría a los estados miembro quemar árboles enteros para cumplir sus objetivos de energías renovables; un hecho que, según los científicos, aumentará las emisiones de gases de efecto invernadero durante décadas y contribuirá significativamente a una mayor degradación de los bosques”.
Coincidiendo con la adopción de la posición de la Directiva de Renovables del Paramento Europeo, Tatiana Nuño, responsable de la campaña de cambio climático de Greenpeace se ha trasladado a Estrasburgo junto con dos mujeres procedentes de las comarcas mineras de carbón de Laciana (León) y de Andorra (Teruel). En su visita querían trasladar a Europa la importancia de generar alternativas sostenibles en estas regiones y reclamar una transición energética justa de forma urgente que tenga en cuenta a todas las personas.
“El Gobierno de España no puede seguir dando la espalda a la lucha frente al cambio climático. Estamos entre los países más vulnerables a los impactos de cambio climático de Europa y en cambio nuestras emisiones siguen creciendo al igual que lo hizo el uso de carbón el año pasado. Y en lugar de desarrollar las herramientas necesarias para una transición energética en manos de la ciudadanía, el ejecutivo pretende aprobar una normativa que dificulte el cierre de las centrales de carbón”, ha declarado Nuño. (Postdigital/Agencias)