Yolanda Díaz, ha anunciado que deja sus cargos orgánicos en Sumar después de conocerse los malos resultados de la formación en las elecciones europeas, en las que ha conseguido tres eurodiputados.
Díaz ha explicado en una declaración sin preguntas que esta renuncia a los cargos internos en Sumar no significa su marcha del Gobierno, por lo que continuará como vicepresidenta segunda del Ejecutivo y como ministra de Trabajo y Economía Social.
«He decidido dejar mi cargo como coordinadora de Sumar. Es necesario que haya un debate y con esta decisión se abre el camino», ha aseverado Díaz. De esta forma, ha asegurado la política gallega, podrá centrarse en los desafíos que, a su juicio, son necesarios para luchar contra una elevada desafección de la ciudadanía, representada por el alto porcentaje de abstención en los comicios europeos.
La decisión de Díaz llega después de que varios miembros del partido criticasen la deriva de la formación y su desgaste del último año. Una de las voces más destacadas ha sido la de Eduardo Fernández Rubiño, que pidió a través de redes sociales responsabilidades a la cúpula de la formación.
Cinco grandes retos
Así, Díaz asume como propias esas responsabilidades y deja todos sus cargos orgánicos en Sumar tan solo unos meses después de haber sido elegida coordinadora general del partido. Su comparecencia ha tenido lugar después de la reunión de la Ejecutiva de Sumar y, en ella, la ministra ha explicado que se dedicará, desde la vicepresidencia segunda del Gobierno y el Ministerio de Trabajo y Economía Social, a cinco grandes tareas.
La ministra ha mencionado la bajada del precio de la vivienda en propiedad y en alquiler, la reducción de la jornada laboral, una reforma fiscal para aumentar la igualdad del sistema, la mejora de los permisos retribuidos y la implantación de la prestación universal por hijo a cargo, así como la restauración de la paz en Oriente Próximo frenando el «genocidio» en Palestina y haciendo que Netanyahu rinda cuentas ante la justicia mundial.