El Ministerio de Trabajo que dirige Yolanda Díaz ha acordado con los sindicatos mayoritarios CCOO y UGT la subida del salario mínimo interprofesional (SMI) a 1.000 euros en 2022. Esto significa que el SMI subirá 35 euros respecto a los 965 euros fijados el año pasado. Un acuerdo, con carácter retroactivo al 1 de enero, del que se retiró la patronal, aunque la CEOE participó en el diálogo y, hasta el jueves, en las reuniones. Esto confirma el deseo de Díaz el lunes de llegar a un acuerdo rápidamente.
La vicepresidenta segunda y ministra de Empleo ha participado en una rueda de prensa junto a los secretarios generales de ambos sindicatos, Unai Sordo y Pepe Álvarez, para explicar el acuerdo tras la reunión de diálogo social celebrada el miércoles. «Es un paso importante para nuestro país», dijo Díaz, destacando el valor del diálogo social y el acuerdo «bipartito» alcanzado.
Para Díaz, «la subida del salario mínimo ha sido muy positiva para nuestro país, y también para nuestra economía». «Gracias a una política de ingresos diferente, ahora estamos mucho mejor que en otras crisis», añadió. La ministra destacó que el SMI es la mejor herramienta para luchar contra la pobreza laboral. Y que el aumento beneficiará principalmente a las mujeres y a los jóvenes. «El SMI se ha utilizado para reducir la brecha de género desde el año pasado. Y desde 2019, la brecha se ha reducido en 4,8 puntos», dijo.
El vicepresidente segundo criticó el espurio mantra de que estas subidas salariales destruyen empleo. Lo defendió con datos, como el del sector agrícola, que actualmente tiene un número récord de afiliados. Este aumento, según Díaz, nos acerca a la equiparación con el resto de los países de la UE. «Es una herramienta para mejorar la vida de las personas», insistió.
Aunque la CEOE se retiró del acuerdo, Díaz le agradeció su disposición al diálogo social. Los empresarios argumentaron que no era el momento adecuado para aumentar el salario mínimo debido a la inflación en España. «Los empresarios saben que la inflación no está causada por los salarios de los trabajadores. Hay un punto de divergencia. Los empresarios saben que esta medida no sólo es buena para los trabajadores, sino también para la economía», dijo el vicepresidente segundo.
CCOO y UGT critican a la patronal
Por su parte, Sordo y Álvarez cuestionaron más directamente las posiciones de los empresarios. Para el secretario general de CCOO, es «incomprensible» que la patronal no apoye esta subida cuando en julio de 2018 acordó con los sindicatos recomendaciones al respecto.
La vicepresidenta segunda y ministra de Trabajo y Economía Social, Yolanda Díaz, interviene en una rueda de prensa para informar de los asuntos tratados en la primera reunión del diálogo social sobre el salario mínimo interprofesional (SMI).
Yolanda Díaz propone subir el salario mínimo a 1.000 euros y espera llegar pronto a un acuerdo.
«Vamos a tener que escuchar cosas impertinentes. No es cierto, es empíricamente demostrable que el impacto del SMI está destruyendo empleo en nuestro país. Y si no está claro, estamos hablando de teología, no de datos», subrayó Sordo. En la misma línea, criticó la crítica del PP de que la medida es «electoralista». «El SMI se negocia a principios de año», recordó el secretario general de CCOO.
Para Álvarez, se trata de «un gobierno que cumple sus promesas», ya que Díaz había prometido en septiembre llegar a los 1.000 euros. «Para la UGT, la cifra de 1.000 euros es muy importante. Es un símbolo porque rompe un techo que parecía difícil de alcanzar por la obstinación de la CEOE», subrayó. Al igual que el Sr. Sordo, subrayó que este aumento «toca directamente el corazón» de los jóvenes y de los sectores precarios.