No solo los grandes grupos internacionales logran que las entradas para sus conciertos se agoten semanas antes de que estos se celebren. Proyectos más modestos consiguen hacerse con una legión de fans tan fiel que en cada directo deben colgar el cartel de «Todo vendido».
La formación indie ideada por Guille Milkyway, responsable del éxito La revolución sexual , ha anunciado que las localidades para su concierto en Madrid el 22 de diciembre se han agotado.
El concierto, que se celebrará en la sala BUT (Ocho y Medio) de la capital, tendrá lugar una semana más tarde que la actuación programada en la sala Noise (Mirror) de Valencia el 15 de diciembre , para el que aún quedan entradas disponibles.
Precisamente, fueron estas dos ciudades las elegidas para arrancar la gira de presentación de su último disco, La polinesia meridional. Ahora, recibirán de nuevo la visita del color y la fantasía del grupo y se convertirán en el lugar de despedida de su larga gira.
La sencillez instrumental de sus directos, que se limitan a sintetizadores contentos, la voz frágil de Milkyway y en especial la conjunción de ritmos cargados de alegría con letras llenas de melancolía, forman un maravilloso cóctel que le ha llevado al estrellato en España. Su sello promete una «vuelta al espectáculo extrasensorial más excitante del momento» y no exageran, ya que sus directos están cargados de fuerza y belleza visual.