
El ministro de Defensa, Pedro Morenés, se reunió este viernes en Washington con su homólogo estadounidense Chuck Hagel para pactar una posición respecto a la postura de ambos países en Siria. Preguntado por la prensa, no quiso aclarar si el Pentágono usará sus bases españolas durante el ataque contra Siria pero desmintió que EEUU haya solicitado a España «ningún esfuerzo militar».
A pesar de las afirmacione sobre la no ayuda, Morenés dejó ver que se pondría de parte de Estados Unidos: «El mundo no puede permanecer impasible ante esta catástrofe que se está produciendo. Hay que alinearse con quienes quieren poner fin a este asunto. España toma esta posición porque nosotros no queremos que siga ocurriendo. Es muy triste ver una organización como Naciones Unidas, que está pensada para evitar precisamente lo que está ocurriendo y cuyo mecanismo interno permite que estas cosas duren tanto tiempo».
El gobierno de Estados Unidos desveló este viernes que ha estado consensuando un texto durante dos días con sus aliados y que aceptarón «muchos ajustes», pero que en lo esencial respetan la posición de la Casa Blanca en el conflicto. El portavoz de Obama reafirmó que la declaración firmada por España culpabiliza al régimen de Asad como responsable de la matanza con armas químicas y que esto es un «respaldo implícito» a un ataque militar por parte de España.