Los desahucios tienen consecuencias nefastas sobre la salud mental de las personas afectadas. Así lo indica un estudio llevado a cabo por científicos de la Universidad de Granada (UGR), junto con investigadores de la Escuela Andaluza de Salud Pública de Granada, que han examinado los síntomas de ansiedad, depresión y estrés de los deshauciados.
Temor, impotencia y horror
Se trata de un periodo prolongado de estrés, “una situación de amenaza e incertidumbre dramática con la que se levantan cada mañana y se acuestan cada noche, que afecta a su integridad física y psicológica”. El trastorno de estrés postraumático se puede desarrollar cuando una persona vive una experiencia traumática con miedo, indefensión y horror.
Implicaciones políticas
Estos hallazgos tienen importantes implicaciones clínicas, sociales y políticas “que exigen medidas urgentes para atender la salud mental de las personas afectadas”, destaca la investigadora. Al mismo tiempo, es necesario implementar políticas efectivas para encontrar soluciones alternativas a la etapa final del proceso de desalojo de viviendas.
En este estudio, publicado recientemente en la revista The Spanish Journal of Psychology, fueron entrevistados de forma individualizada 205 participantes voluntarios asistentes a la Plataforma Stop Desahucios de la ciudad de Granada y su área metropolitana. (SINC)