Unidos Podemos ha defendido este martes en el Pleno del Congreso una proposición de ley para elevar progresivamente el salario mínimo hasta situarlo en el 60% del salario medio neto español, de manera que pase de los escasos 655,20 euros mensuales actuales a unos primeros 800 euros en 2018 hasta los 950 euros en 2020.
Vidal ha criticado que en España tener un trabajo no es sinónimo de estabilidad económica gracias a las «leyes precarizadoras del PP», así como el escaso incremento en la última década, de solo 55,20 euros en nueve años. El último incremento, un 0,25%, ha sido, a juicio de la diputada, «reírse de la clase trabajadora».
Desde el grupo confederal advierten de la brecha existente entre los 655,20 euros mensuales que hay en España y los del resto de los países de la Unión Europea, poniendo como ejemplo a Francia (1.462 e/m) o Reino Unido (1.202e/m). Asimismo, han recordado los «graves incumplimientos» en materia de derechos humanos que señalaba el Comité Europeo de Derechos Sociales en su informe anual de 2015.
Así, tal y como ha recordado Vidal, el Comité apuntaba a que el suelo salarial fijado en España «no asegura un nivel de vida decente» y que su cuantía, por debajo del 50% del salario medio neto –en torno a los 1.880 euros–, suponen condiciones «manifiestamente abusivas».
Apoyo del PSOE con reticencias
Por su parte, el portavoz de Empleo del PSOE, Rafael Simancas, ha señalado que comparte la necesidad de elevar el suelo salarial, aunque detecta «deficiencias» y «carencias» en el texto presentado por la confluencia de izquierdas, indicando que aparece un objetivo marcado para 2019 que posteriormente no es especificado, y en todo caso el salario marcado no llega al aludido 60% del sueldo medio.
«Un país que apuesta por crecer con salarios bajos es un país socialmente injusto, económicamente débil y democráticamente enfermo», ha dicho durante su intervención, calificando esta estrategia de «inhumana, inequitativa e ineficaz».