El Parlament catalán ha aprobado este viernes la nueva ley de consultas no refrendarias y de participación ciudadana con 106 votos a favor (CiU, ERC, PSC, ICV-EUiA y CUP) y 28 en contra (PPC y Ciutadans).
La ley con la que el presidente de la Generalitat, Artur Mas, tiene previsto convocar la consulta del 9N ha recabado el 78,5% de los apoyos de la Cámara catalana, más de tres cuartos de la misma, si bien el PSC ha votado a favor de la norma pero considera que no puede utilizarse con la finalidad prevista el día 9 de noviembre de la consulta independentista.
A la espera de que el Diari Oficial de la Generalitat (DOGC) publique el texto para que entre en vigor y de que el presidente Artur Mas firme después el decreto de convocatoria del 9N, el Gobierno central ya ha advertido de que la legislación no contempla la consulta, y tiene previsto que el Consejo de Ministros se reúna de manera extraordinaria para elaborar un recurso de inconstitucionalidad de esta.
“Una buena herramienta para defender la participación ciudadana”
Según el diputado Josep Rull (CiU), el texto permitirá a los catalanes disponer «de las mejores herramientas para que la nación pueda decidir», aunque ha dicho que no es una ley hecha ‘ad hoc’ para el 9N.
Para la diputada de ERC Gemma Calvet la norma es totalmente constitucional, y, tras proclamar que este viernes es un «día histórico», ha instado al Gobierno central a no recurrirla ante el TC.
Ferran Pedret (PSC) ha defendido este viernes el ‘sí’ de su partido a norma porque es una buena herramienta para promover la participación ciudadana, pero ha avisado de que en ningún caso es «el instrumento» para convocar la consulta del 9N, y que, si así se hace, supone desconocer la ley.
El portavoz adjunto del PP en la cámara, Santi Rodríguez, ha lanzado un mensaje al PSC en su intervención: «Hágannos caso. Déjense de puñetas y voten que ‘no», y ha destacado que el rechazo de su grupo es un ‘sí’ a la democracia.
Desde ICV-EUiA, Dolors Camats ha lamentado la actitud de quienes ven «tan problemático» para algunos preguntar a la ciudadanía, porque es básico en cualquier democracia, y ha destacado que el objetivo debe ser vertebrar una nueva manera de hacer política para acercar a representantes y representados.
El líder de C’s, Albert Rivera, ha instado al presidente de la Generalitat, Artur Mas, a asumir que no tiene competencias para la consulta del 9N y ha definido el texto aprobado como «un golpe al Estatut y a la Constitución».
El diputado de la CUP Quim Arrufat ha alertado de que habrá quienes «fracturarán lo que haga falta» antes de dejar que los catalanes voten; y el diputado no adscrito y exmilitante del PSC Joan Ignasi Elena ha proclamado que la norma responde al anhelo colectivo de los catalanes.
Concentración ciudadana a las puertas del Parlament
Mientras la cámara hacía este debate, partidarios y detractores de la independencia de Cataluña se han concentrado ante el Parlament coreando consignas y exhibiendo pancartas, y la tribuna de invitados del pleno se ha llenado, entre los cuales estaban las activistas independentistas Muriel Casals (Òmnium Cultural) y Carme Forcadell (ANC).
También han asistido a la tribuna el alcalde de Barcelona, Xavier Trias; el presidente de la Diputación de Barcelona, Salvador Esteve; el de la Diputación de Tarragona, Josep Poblet; el de la Diputación de Girona, Joan Giraut; el secretario general de UGT Cataluña, Josep Maria Álvarez, y el secretario general de CC.OO. Cataluña, Joan Carles Gallego. (Postdigital/Agencias)